domingo, 9 de dezembro de 2007

Ayer el mar era una ausencia

Hoy he sabido la verdad.
Mi casa estuvo cerrada
todo el tiempo.
Yo alejado y usted más lejano aún
entre sus sueños.
Al regresar, alguien ha dicho:
"le estuvieron esperando ayer
toda la noche",
y me dieron las señas que a usted
le corresponden.
Más tarde, entre el estupor de la noche
y mi cansancio,
he recebido la noticia
que aún arde entre los vagos lirios
de la frente:
"Su alumno Francisco ha muerto
ayer temprano."
Ayer temprano el mar era una ausencia,
era sólo un pretexto de la cansada tierra.
El cielo germinaba sus palomas,
y las nubes
brillaban como una anunciación.
Mas hoy dejo abierta mi casa
al aire de la noche
para que pueda usted entrar.
Carlos Galindo Lena
A foto: um dia de dezembro... na antiga estação de trem. Jovellanos, Matanzas... Cuba